Los transformadores de corriente (TC) son componentes esenciales en los sistemas eléctricos modernos, ya que permiten una medición precisa de la corriente y la protección del sistema en diferentes niveles de tensión. En entornos de aparamenta de media y alta tensión, los TC se utilizan ampliamente para la monitorización, la medición y la protección de relés.
En sistemas de 11 kV a 36 kV , los TC suelen instalarse dentro de la aparamenta o montados sobre aisladores. Estos TC están diseñados para ofrecer precisión en condiciones exigentes, garantizando el funcionamiento fiable de los relés de protección y los equipos de medición. Por ejemplo, en aplicaciones RMU (Unidad Principal de Anillo), los TC de resina fundida o toroidales se integran en espacios compactos, donde la estabilidad térmica y el rendimiento del aislamiento son fundamentales.
En subestaciones de alta tensión (66 kV y superiores), se utilizan transformadores de corriente sumergidos en aceite o con aislamiento en gas. Estas unidades están diseñadas para manejar corrientes más elevadas y soportar tensiones ambientales. Su salida está conectada. A relés digitales o sistemas SCADA para monitoreo en tiempo real y control remoto de protección. El uso de transformadores de corriente de relación múltiple permite flexibilidad para diferentes condiciones de carga, lo que ayuda a las compañías eléctricas a gestionar la estabilidad de la red con mayor eficiencia.
A la hora de seleccionar un TC, es importante tener en cuenta:
·Corriente primaria y secundaria nominal
·Clase de carga y precisión
·Material de aislamiento y método de instalación
·Cumplimiento de las normas IEC o ANSI
Al comprender el entorno de la aplicación y el nivel de voltaje, los ingenieros pueden elegir el tipo de TC adecuado (ya sea de ventana, de barra o de bobinado) para garantizar la precisión y la longevidad del sistema.